“O se opta consciente y reflejamente, o la opción de nuestra vida se realiza sin que ni siquiera caigamos en la cuenta de ello. Pero en cualquier caso, nuestra vida y nuestra acción se inscriben en uno de los sectores contendientes. No hay marginados frente al conflicto social; hay sencillamente, contendores abiertos y contendores solapados, luchadores convencidos y tontos útiles. Demasiadas veces, y más por ingenuidad que por mala voluntad, los universitarios formamos parte de este último grupo. Todos estamos comprometidos: resta saber por quién”.
Ignacio Martín-Baró

martes, 10 de marzo de 2015

Otro primer día de clases...

Hace algún tiempo hice un apunte en el que recordaba el día que entré a la U. Recuerdo perfectamente aquel 27 de febrero de 1995, veinte años, ¡cómo pasa el tiempo!

Cuando entré a la U aún tenía cara de adolescente, estaba flaco, tenía el pelo corto y un "bronceado mejenga"; hoy luego de veinte años, de esa cara de adolescente no queda ni el rastro, los kilos que tengo de más se notan a unos tres kilómetros de distancia, el pelo lo ando corto pero porque se me cayó y el pelo que me queda lo tengo en la cara y ya empieza a ponerse blanco, el "bronceado mejenga" ahora es "bronceado morgue". La velocidad, el dominio de la pelota, son cosa del pasado y forma parte de las anécdotas futboleras; a estas alturas jugar al fútbol es una sana recreación que sirve para mantener el peso raya y no aquella recreación competitiva de los buenos viejos tiempos que ya no volverán. O sea de aquel púber que entró a la U, ya no queda nada más que un bonito recuerdo.

Hoy 20 años después de aquel día en que tímidamente me asomé a aquella clase en el edificio de biología en el que se impartiría Teorías y Sistemas de Psicología I, me inauguré como profesor en el Recinto de Guápiles. Sin duda, otro lugar, todo una experiencia, una gran responsabilidad. No es fácil. No es simplemente pararse frente a un grupo de estudiantes y echarse un rollo de unas tres horas ¿quién puede hacer eso? ¿quién puede soportarlo?

Para ser sincero estoy muy contento con este otro inicio de clases que desde hace mucho tiempo quería, con estar en ese otro lugar. Espero hacerlo bien, espero que al final del semestre esté satisfecho, que el grupo que matriculó Bases Psicosociales de la Educación esté también satisfecho, espero haberles aportado algo. Doy por descontando que ese grupo me aportará mucho.



Pd. Tampoco se vayan a creer que estoy destruido físicamente...