“O se opta consciente y reflejamente, o la opción de nuestra vida se realiza sin que ni siquiera caigamos en la cuenta de ello. Pero en cualquier caso, nuestra vida y nuestra acción se inscriben en uno de los sectores contendientes. No hay marginados frente al conflicto social; hay sencillamente, contendores abiertos y contendores solapados, luchadores convencidos y tontos útiles. Demasiadas veces, y más por ingenuidad que por mala voluntad, los universitarios formamos parte de este último grupo. Todos estamos comprometidos: resta saber por quién”.
Ignacio Martín-Baró

jueves, 14 de mayo de 2015

El juego mediocre del Macho

Son pocas las veces en que dos de los equipos que más odio quedan eliminados el mismo día. Sí, aunque en dimensiones futbolísticas años luz una de otra, hoy quedaron al lado del camino el Real Madrid y el Deportivo Saprissa. Que pierdan estos dos equipos para mí, es y será siempre, motivo de alegría, motivo de celebración.

Pero no comentaré lo del Madrid, no hoy. Lo que quiero comentar es fútbol de de esta dimensión del subsuelo futbolero, o sea las semifinales del campeonato local.

Puro romanticismo, lo reconozco. Me gusta el fútbol bonito, y punto. No admito que un equipo que tiene los recursos para hacerlo, o al menos intentarlo, no lo haga. Por eso me resulta insoportable el estilo de Mourinho con todos los equipos que dirige (para poner un ejemplo de la otra dimensión futbolera). Es cuestión de gustos. Pero para mí no está por encima el resultado. No me gustan los técnicos resultadistas. Insisto, puro romanticismo.

Esta noche, como tantas otras, el Macho Ramírez jugó a no perder, hoy le salió, los dos campeonatos anteriores no y le regaló el título a un equipo saprisista inferior, pero con actitud ganadora, con más ganas de ganar. Así tal cual.

El domingo la Liga debió golear, dos a cero fue un resultado cortísimo. Baratísimo le salió a un equipo saprisista que quedó al desnudo, un equipo que juega mal, que no tiene equilibrio. Pero la Liga no goleó y el Macho ha decidido una vez aplicar la "táctica Tuasa". El Macho decidió que es necesario sufrir para pasar. El Macho decidió que la táctica que le llevó al fracaso frente al mismo rival dos campeonatos seguidos era la adecuada. Hoy le salió. Pero la Liga no perdió simplemente porque el rival que tenía en frente no es mejor. Y bueno la Liga está en la final, ¿pero porqué hay que jugar así? ¿porqué no jugar con todo como el domingo? El Macho otra vez renunció al ataque, renunció a jugar. Y a mí me resulta imperdonable, porque el domingo quedó claro que hay equipo para hacerlo mejor. Claro que el equipo contrario hace lo suyo también, pero eso no es pretexto.

Que un equipo con los recursos para jugar bien y ofensivo juegue con el bus atrás es una falta de respeto a sí mismo, al público y al rival. Mírese como se mire es una ofensa.

Me alegra que la Liga pueda ser campeón. Me alegra que Saprissa quede fuera. Pero no puedo celebrar la mediocridad de este tipo. Un juego indecoroso con un resultado ajustado. Un estilo feo, muy feo. Un sufrimiento innecesario. Habrá quien celebre. Habrá quien crea que no importa jugar feo si se pasa a la final o se gana un campeonato, total al final lo que cuenta son los números, que eso es lo que queda registrado. Que esto es el fútbol moderno. Puede ser.

Pero yo prefiero perder jugando bonito que ganar de esta forma. Y esto no quiere decir que me guste perder. Cuando jugaba fútbol siempre jugué a ganar, me gustaba competir, nunca compartí el estilo defensivo de los entrenadores que me dirigieron. Toda la vida he admirado a los jugadores virtuosos, a los defensores que salen jugando. Me gustan esos equipos de época que ganan jugando bonito, y pierden jugando bonito, fieles a su estilo.

Este equipo de la Liga es posible que salga campeón (no subestimo al equipo Herediano, pero tampoco es un derroche de fútbol), pero no será un equipo de época. No se recordará al Macho por su buen juego, será una estadística. Y terminar siendo una estadística me parece patético.