“O se opta consciente y reflejamente, o la opción de nuestra vida se realiza sin que ni siquiera caigamos en la cuenta de ello. Pero en cualquier caso, nuestra vida y nuestra acción se inscriben en uno de los sectores contendientes. No hay marginados frente al conflicto social; hay sencillamente, contendores abiertos y contendores solapados, luchadores convencidos y tontos útiles. Demasiadas veces, y más por ingenuidad que por mala voluntad, los universitarios formamos parte de este último grupo. Todos estamos comprometidos: resta saber por quién”.
Ignacio Martín-Baró

miércoles, 2 de noviembre de 2011

La Billetera como límite de la democracia

En alguna ocasión, me parece que fue con motivo de la negociación del presupuesto universitario el año pasado, dije (en el programa de Radio U con el que colaboraba, o en un apunte, no lo recuerdo) que lo que me gustaba de las crisis es que se ve quién es quién. Con la actual crisis global del capitalismo sucede  precisamente eso.

A muchos se les cae su máscara y se ve su verdadera cara (colmillos incluidos), los discursos y las contradicciones se hacen evidentes, sino ¿Cómo se explicaría que tras el anuncio de un referendum en Grecia para aprobar o no el "rescate" a la quebrada economía griega, se fueron en picada los principales indicadores de la bolsa, los medios de comunicación comerciales presionan para que no haya referéndum con todo tipo de campañas de terror, y los políticos que se autodefinen como demócratas comprobados, cierren filas contra la consulta? Es que, el tan sólo anuncio de un referéndum hundió la bolsa, evidenciando que esta "democracia" tiene como límite La Billetera de los bancos, los empresarios y los especuladores, porque la billetera que sí se puede tocar es la de la gente.

Uno puede cuestionar si Papandreu está siendo oportunista al hacer la consulta, o si más bien se trata de un acto desesperado de sobrevivencia política ante el inminente voto de censura en el Parlamento (o ambas), lo que no debería estar en cuestión es si el pueblo tiene derecho a decidir sobre su futuro, sobre todo si lo que se decide, no es sólo la inyección de dinero, sino el duro plan de ajuste que deberá imponerse si el "rescate" se hace efectivo. Las medidas hasta ahora aplicadas (con una dureza irracional) no han sacado a Grecia de la crisis, sino que pareciera que la hunden cada vez (y con ella a toda la zona Euro). Esto es así porque las medidas adoptadas no están pensadas para que Grecia y su gente salgan de la crisis, sino para rescatar a los bancos, a los especuladores y a los empresarios. Cabe decir que son todos éstos, junto a una clase política corrupta, quienes "maquillaron" los estados financieros griegos, es decir, con sus prácticas de especulación y saqueo del erario hicieron fiesta, y ahora quienes se tienen que apretar el cinturón son todos menos ellos, porque quieren seguir con la fiesta. Por cierto, como dato, reseña Ignacio Escolar que "las mentiras contables de Grecia tuvieron sus cómplices necesarios. Concretamente, Goldman Sachs: ejecutivos como Mario Draghi o Antonio Borges, que fueron vicepresidentes de este banco que montó la ingeniería financiera con la que Grecia escondió su enorme deuda. Draghi es ahora el presidente del Banco Central Europeo. Borges dirige el FMI en Europa". Toda una belleza, además los premian, seguramente porque cumplieron con su misión de saqueo.

El terremoto político y económico de la consulta griega nos brinda esa oportunidad para que podamos distinguir con toda claridad lo demagógico y vacío que es el discurso "democrático" de hegemonía neoliberal en Occidente, se trata de un discurso profundamente autoritario, que no admite alternativas, Sarkozy ha advertido "rescate o caos", y junto a Merkel presionan para que no haya consulta, ya veremos los alcances y el nivel de presión que se ejercerá sobre Grecia. Lo cierto es que el rescate es impopular, y según las encuestas ganará el no al "rescate".

Quién es quién se está viendo justo ahora. Los políticos de la derecha y los "socialistas"  se oponen a la consulta, por algo será, pero de seguro no por demócratas, son demócratas de pacotilla, y además de la billetera para afuera.

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