Decía Saramago: "yo no soy pesimista... es que el mundo es pésimo", y luego añadía que era más bien realista. Cuando veo las noticias no puedo más que plegarme al claro pensamiento de Saramago. Intentaré a través de esta divagación explicarles porqué.
Hemos visto en las noticias el terrible y cobarde asesinato de Jairo Mora Sandoval. Tal parece que el tema del narcotráfico y la violencia está desbocado en Limón, mientras las autoridades aseguran que vivimos en un país más seguro, este tipo de actos cobardes contra quienes protegen la naturaleza parecen demostrar lo contrario. ¿Y el gobierno? Pues callado, porque no tiene autoridad moral, moral tiene mucha, tanta que le da para tenerla doble y hasta triple, pero autoridad moral, ni pizca. Recordemos aquel reaccionario discurso de la presidente (con minúscula y en masculino, se comporta como macho) frente a empresarios de la zona norte en el que llamó a enfrentar a esos "grupos radicales" (ambientalistas), aquello fue en octubre de 2010, cuando la lucha con la minería abierta estaba floreciendo y cada día ganaba más simpatía entre la población. Transcribo parte del discurso de Chinchilla:
"Cuando ponemos en costar rica el mapa el de las zonas protegidas y el mapa de la pobreza los dos coinciden (...) no es justo que los habitantes de esa zona se le haya dado oportunidades de desarrollo, ellos son los que están sobre sus espaldas el modelo de sostenibilidad de Costa Rica, por eso es que yo necesito que en casos muchos que vamos a enfrentar personas como ustedes nos ayuden a levantar la voz contra algunos grupos radicales que no quieren proteger el medio ambiente, que lo que quieren es hacer... [aplausos] porque esos no están pensando la protección del medio ambiente, quisieran hacer de Costa Rica un museo de historia natural, en donde está la naturaleza muerta porque los hombres no tienen oportunidades en esas regiones. si en algo tiene sentido el cuidar la naturaleza es para que la gente que vive en ella pueda tener mayor bienestar (...) en la zona sur me encontré grupos radicales que dicen no más turismo, y a esos grupos radicales los vamos a tener que enfrentar juntos" (el discurso se puede escuchar aquí: http://www.goear.com/listen/75bc5d7/declaraciones-sobre-trabajo-y-ambiente-laura-chinchilla)Tal perece que algunos se lo han tomado en serio y enfrentan a los "radicales", como también ya lo habían hecho hace veinte años. Por eso es que este tipo de discursos tan reaccionarios son tan peligrosos, porque se trata de gamonales, de terratenientes, de retrógrados, que suelen tomar la ley en sus manos, cuando no armar a grupo parapoliciales que aterrorizan campesinos y líderes comunitarios. A eso justo instaba la Chinchilla, y es que si sumamos la variable narcotráfico, pues estamos jodidos, sino pregunten en Colombia.
Mientras, la DIS (ese aparato policial-político inservible y caro) considera que un grupo de seudo-anarquistas encapuchados son terroristas y un peligro para la seguridad nacional, los encapuchados realmente peligrosos matan a un ambientalista. Mientras la Chinchilla viaja en un jet privado de empresarios más que sospechosos, la DIS ve para cualquier menos para donde tiene que ver. La verdadera amenaza no son esos anarquistas de juguete, que además deben estar infiltrados, es el narcotráfico. Lo que no sabemos es si el narcotráfico ya llegó a las altas esferas del gobierno. No me extrañaría. Lo que sí sabemos es que no nos vamos a enterar a través de la Asamblea Legislativa gracias a que el PLN (no podía ser de otra forma) y sus aliados, se negaron a investigar.
No quiero insinuar que es el gobierno, o un político, o un empresario quien mató a Jairo Mora, sólo aseguro que es producto de un desastre de gobierno, que se ha concentrado más en los buenos negocios y el chorizo, que en generar sólidas políticas sociales que frenen la lacra del narco. Limón sigue abandonado por el malgobierno y la propuesta que mágicamente resolverá los problemas de empleo es otra concesión, que vistas las condiciones de "negociación" no debe ser otra cosa que un megachorizo. Esa es la propuesta del gobierno. Mientras, las condiciones de vida de los limonenses seguirán empeorando. Mientras, a los defensores de la naturaleza, a los luchadores sociales los seguirán matando. Esa es la receta neoliberal, yo soy algo pesimista... nos la van seguir aplicando.
Toda la boca llena de razón, no se puede decir más!
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