A la derecha Oldemar Rodríguez |
Héctor González, candidato oficialista |
Henning Jensen, poco antes de ser declarado ganador |
Inicia un nuevo periodo en la Universidad, y como siempre tras un proceso tan reñido, lo primero será la reconstrucción de algunas lazos, y digámoslo así, la pacificación. Los ataques fueron fuertes, en muchas ocasiones bajos, los dos principales candidatos se dieron duro, y más que los candidatos, la gente que estaba en su entorno lanzó verdadero veneno, uno esperaría otro tipo de política en una universidad, pero por ratos la cosa fue carnicera.
La "fiesta electoral" en las afueras del comedor |
Afueras del comedor estudiantil |
La de ayer fue una fiesta electoral a la que estaban invitados unos cuantos, y a la que a una gran mayoría de la comunidad universitaria les fue indiferente. Muchos se han preguntado si realmente cambiaría algo, independientemente de quien ganara, otros calificaron la campaña como "superficial", sin discusiones de fondo, y sin verdaderos planteamientos.
La presidenta del TEU cierra el acto declarando a Jensen "ganador provisional". |
Sobre el interinazgo. No puede ser posible que la Universidad contrate a los profesores a destajo. La mayoría de los profesores de la UCR trabajan con salario 8 meses al año. Durante julio, diciembre, enero y febrero la gran mayoría no tiene salario. Esto por supuesto, además de inmoral, es un ejercicio de la violencia más pura contra un trabajador. Pero también se presta para todo tipo de chantajes, y clientelismo. ¿Cómo se puede pretender que un docente se pueda dedicar a la academia con este sistema de pagos? ¿Cómo exigir calidad si durante un tercio del año los docentes deben comer del aire o buscar otros trabajos? ¿Cómo es posible que una Institución que ha denunciado todo tipo de violaciones laborales en la empresa privada mantenga este esquema perverso de contratación? ¿Es que acaso las clases se preparan solas? ¿O será que creen que alguien puede preparar sus clases unos días antes de empezar el ciclo lectivo? Este sistema lo que ha generado es la expulsión sistemática de toda una generación de gente comprometida, y obliga a la gente que quiera quedarse a "chuparle las medias" a los directores de escuela y decanos, eso sin mencionar los concursos de simpatía en los que se han convertido estos procesos de asignación de plazas en las Asambleas de Escuela. Esto es un problema estructural, una lógica perversa de la Universidad, no son casos aislados, ni es un problema de personas, como han intentado justificar algunos.
Es imprescindible buscar una solución a este asunto, del tal forma que se respeten los derechos laborales, pero que también se asegure la calidad de la enseñanza, y las posibilidades de que los estudiantes mediante su voz pueden remover a los mediocres, la plaza en propiedad tampoco puede ser una garantía de por vida para nadie. Pero es justo que los interinos tengamos que pagar el "derecho de piso" de esta forma.
Este es un reto enorme para el Rector Electo, este es un tema central, y está ligado a la política de recambio generacional que se vaya a asumir, como también está ligado a la política de regionalización. Será vital la persona que sea nombrada en la Vicerrectoría de Docencia. Si es la persona que se perfila para tal puesto, estoy seguro de que al menos se iniciará una buena discusión en este sentido, yo esperaría que no se quedara en la discusión. Me parece que los interinos deberíamos ir en esta dirección, la de organizarnos e iniciar un debate amplio que remueva toda la estructura vertical y excluyente de NUESTRA UCR.
Lo dejo hasta acá por el momento. Ya retomaré otros asuntos que me parecen de importancia en la agenda universitaria de cara al nuevo periodo (que presumimos, como ya es tradición la U, será de ocho años). Ya veremos si efectivamente se trata de un cambio de verdad, o sólo de un cambio de nombres y de formas. Yo espero que lo primero.
Felicitaciones a Henning Jensen, tiene una monumental tarea por delante.